Project Description
Francis nació en una granja industrial en Galicia e iban a dejarlo morir porque estaba enfermo y curarlo no era rentable para el ganadero. Por suerte alguien lo vio y movió cielo y tierra para salvarle. Este grandullón lleva tres años en Santuario Compasión Animal, y hoy podemos mirarle a la cara y sentir su felicidad. Estas son las historias que construimos cada día en el Santuario.
La diferencia está clara. Francis es alguien, no algo. Y desea disfrutar de cada momento de su vida como cualquier otro animal. En una granja no le permitirían ser alguien, ni le permitirían disfrutar de su vida. Sin embargo en un Santuario volvemos del revés las absurdas normas que la sociedad ha impuesto.